El Cabernet Franc es una de las cepas más plantadas en el mundo. En Argentina aparece como una variedad relativamente reciente. Original del clima húmedo de Bordeaux (Francia), se adaptó de manera excepcional a los viñedos de altura (a más de 900 msnm) y al clima seco de la provincia de Mendoza, al oeste de Argentina.
Presenta una frescura natural en boca, básicamente dada por las notas silvestres de hierbas aromáticas, como menta, peperina y albahaca. Presentan notas frutales como arándanos, grosellas y frutos del bosque, y usualmente también sobresalen aromas a pimiento, ají, o incluso pimienta negra.
Son vinos equilibrados en acidez y taninos ideales para acompañar pastas con salsa de tomate, pizzas, lasaña, o un asado.
El Cabernet Franc es una de las cepas más plantadas en el mundo. En Argentina aparece como una variedad relativamente reciente. Original del clima húmedo de Bordeaux (Francia), se adaptó de manera excepcional a los viñedos de altura (a más de 900 msnm) y al clima seco de la provincia de Mendoza, al oeste de Argentina.
Presenta una frescura natural en boca, básicamente dada por las notas silvestres de hierbas aromáticas, como menta, peperina y albahaca. Presentan notas frutales como arándanos, grosellas y frutos del bosque, y usualmente también sobresalen aromas a pimiento, ají, o incluso pimienta negra.
Son vinos equilibrados en acidez y taninos ideales para acompañar pastas con salsa de tomate, pizzas, lasaña, o un asado.